El poder de la luz

El día 21 de junio a las 19:18 (hora local peninsular) se producirá el solsticio de verano para el hemisferio Norte. En este día viviremos el día más largo y la noche más corta del año.
Aunque los dos equinoccios y los dos solsticios marcan momentos culminantes en el calendario solar, quizá sea el de verano el más celebrado por las culturas antiguas debido a la importancia de la luz en sus vidas. No deja de ser curioso que la mayor parte de las fiestas para celebrar el triunfo del Sol, se hagan de noche a la luz de las hogueras…

En la actualidad, no necesitamos recurrir a las hogueras para disfrutar de las noches de verano. Tenemos varias posibilidades para iluminar el jardín o la terraza.

La luz más bonita y magnética, para mi gusto, es la de las llamas de las velas. Para colocarlas existen un sinfín de portavelas, candelabros, faroles, cuencos con agua, fotóforos, hurricane lamps… y para muestra, un botón!!!

En la imagen hay un candelabro (Hábitat), un cuenco lavafrutas (Sandra Marques) relleno de agua con velas flotantes, un farol grande (Verdecora), dos fotóforos: uno con forma de calabaza y otro decorado con hoja de hiedra (CASA), un portavelas (Crate&Barrel).

Aunque cada vez hay más  modelos de velas, cada cual más bonita, yo me decanto por las llamadas velas de té. Son las más prácticas puesto que se controlan mejor y se consumen en su totalidad. Además, al ser pequeñas, se pueden colocar en cualquier rincón de la mesa. Igualmente te recomiendo que adornes tus fotóforos o portavelas para darles un toque personal. No es difícil: con un poco de rafia, arpillera, unas piedrecitas, hojas o flores de temporada… ¡Quedarán mucho más acogedores!

Últimamente está muy de moda el colocar velas enmarcando los caminos.

En esta foto, tienes unos globos de vidrio sobre soportes de hierro de Crate&Barrel  (11$/unidad) que darán un aire sofisticado a tu  jardín.

Otra posibilidad más clásica pero igual de sugerente son las escudillas romanas de Unopiù (38€/12 unidades). Son recipientes de barro cocido rellenos de cera limonera que duran unas 7 horas. También se puede comprar aparte picas de hierro forjado para colocarlas en altura.

Más formas de iluminación sutil: las balizas solares. Su ventaja es que no consumen electricidad. El panel solar transforma la luz del sol en energía por lo que funcionan sin cables ni enchufes. Sitúa el panel de células solares independiente bien expuesto al sol entre 9 y 12 horas y quedarán completamente cargadas. Este modelo es de 8 globos es de Ikea (Solvinden, 14.95€). Se puede conseguir en azul, blanco, amarillo o rosa fucsia. También lo tienen en Leroy Merlin en versión multicolor por 19,95€.

En este otro caso tenemos luces LED (Light Emitting Diode) o lo que traducido al español sería "Diodo Emisor de Luz". Estas están concebidas para decorar los exteriores o los árboles de Navidad por lo tanto no hay peligro de que entren en contacto con la madera. El proveedor tiene distintos modelos, acoplables unos con otros, que permiten hacer distintas combinaciones y conseguir la longitud que necesites.  En este caso, usé cuatro módulos. Tres acoplados entre sí, con los leds pegados al cable, que fuimos enroscando alrededor de las vigas superiores de la pérgola. El cuarto, que situamos en el frontal, tiene luces con caída hacia delante. Ten en cuenta que necesitan enchufe.

En cuanto a las lámparas de techo, de pared o sobremuro, verás en los sitios especializados en iluminación de exterior (resistentes a la humedad y la corrosión) que todo se reduce a sota, caballo y rey. Nos costó mucho encontrar un farol con encanto para la pérgola pero, finalmente, lo encontramos en Los Peñotes. 

El estilo que más me gusta es el de los faroles de pescadores como los de la foto. Es el modelo Creta de Unopiù y lo puedes conseguir en tres colores diferentes (blanco, gris y verde)

Una vez conseguida la lámpara recuerda que lo más importante para conseguir una luz cenital acogedora es que las bombillas sean de luz amarilla o cálida.

PRÓXIMA CITA: EL SONIDO EN EL JARDÍN (21/06/2011)