El tiempo pasa pero todo vuelve… así que aquí estamos ante
un nuevo mes de mayo.
También he recibido la indeseable visita de los pulgones.
Cuando los pillo a tiempo, los suelo quitar con la mano o con agua a presión.
Si no mejora la cosa, uso el Oleatbio (jabón potásico) y, si el asunto escapa a
mi control, llamo a mi jardinero de Agrogarden. Entre otras plantas, el ataque ha ido contra Merlín, mi
roble rojo, así que no me ha quedado más remedio que fumigar…
FUMIGACIÓN
Conozco gente que fumiga todos los años por su cuenta pero hay que tener
mucho cuidado, no tomárselo a la ligera y fumigar sólo cuando sea estrictamente
necesario. Se trata de productos
peligrosos para los seres humanos
y para la fauna cercana (no sólo
mascotas sino también pájaros insectívoros, mariquitas, abejas, sapos, ranas,
lagartijas, salamanquesas…).
No en vano, a los profesionales les exigen tener un carnet para manipular y controlar el uso de los productos
fitosanitarios peligrosos, para no mezclar unos productos con otros y para la
correcta eliminación de éstos. También hay que protegerse de arriba abajo con
vestimenta especializada y dejar pasar unas horas antes de volver a salir al
jardín.
Por todos estos motivos, prefiero que lo haga un profesional!!!!
TREPADORAS CON FLOR
Para este mes las plantas que os recomiendo son todas trepadoras. Son una opción estupenda tanto para la terraza como para el
jardín. Además, al tapizar las paredes son mucho más vistosas y crean una
sensación de vergel muy agradable.
Las hay muy conocidas: glicinia, buganvilla, jazmín, rosa,
madreselva, plumbago, campsis, capuchina, pasiflora… pero también hay otras
especies menos conocidas que me encantan.
Para empezar, las clemátides (Clematis spp.). Hace un par de años, cuando conseguí mi Polish
spirit (foto de la izquierda), no era habitual de los viveros de mi zona. Esta primavera he visto
bastantes.
No tienen un gran desarrollo así que para las terrazas van
fenomenal. Eso sí empieza a encauzarlas para que trepen bien derechas porque
sus tallos tienden a aferrarse unos con otros como si fueran tentáculos (ver dibujo de Fine Gardening).
Hay de tres tipos dependiendo de su época de floración
(final del invierno, primavera o pleno verano). Tampoco será excusa el color
porque hay de todos los colores!!!! Aunque no quieren mucho sol, aguantan bien
este frío meseteño nuestro…
El guisante de olor (Lathyrus
odoratus) es una trepadora anual con flores perfumadas muy usadas para
ramos.
Varias marcas (Batlle, Vilmorin) venden semillas así que las
podéis criar vosotros mismos en
semilleros. Fijaos bien que sean la variedad trepadora.
Dicen que crecen hasta
el metro y medio pero calculad que pueden llegar hasta los 3 metros de alto.
Plantadlas en grupos de colores variados.
Esta última trepadora la he descubierto hace poco en una revista
inglesa, el martillo de carpintero (Tropaeolum speciosum). Un nombre
horrible para una planta preciosa…
Es originaria de Chile, de la familia de la capuchina pero mucho más vistosa por
sus hojas y por sus flores de un rojo intenso. No crecen más de 3 metros y, al
igual que las clemátides, quieren tener los pies en sombra.
Yo le cubrí las raíces a la mía con unas tejas de barro pero también puedes poner delante otra planta para que le dé siempre sombra.
Yo le cubrí las raíces a la mía con unas tejas de barro pero también puedes poner delante otra planta para que le dé siempre sombra.
Para completar este post la semana que viene, os mostraré todos los soportes que he visto para trepadoras...
PRÓXIMA CITA: SOPORTES PARA TREPADORAS (22/05/2014)
A mi también me gustan mucho las trepadoras. Tengo un jazmín precioso desde hace muchos años.....
ResponderEliminarSaludos.
Como me gusta pasar por tu blog y leer tranquilamente todas aquellas cosas que sabes.
ResponderEliminarUn saludo Maricot!